Formas del amor. Científicos del Conicet en un barco, con un submarino no tripulado en el fondo de Mar del Plata, transmiten en vivo lo que ven con la cámara. La gente interactúa en YouTube. Hay una científica que comenta. Se llama Nadia y es un absolute delight, un bálsamo de apreciación, de sorpresa. Saluda a los corales, a las colonias de tentáculos. Habla de plumas de mar, de nidarios. “Nieve marina”, así llama a la materia orgánica que flota, que se genera en la superficie. Fuente de energía que llega al fondo. En el chat preguntan sobre el cangrejo que parece quedó atrapado en una aspiradora y Nadia dice que apagaron la aspiradora y lo dejan dormir abrazado con ella. Hablan de Nemo y de cómo los peces como él resisten la picazón de las anémonas. Los corales crecen para abajo, nos dice.
Hay 52000 personas flotando en esta misión. Preguntan por “cangrejín” y piden por Nadia cuando ella se toma el receso. Dicen “Nadia, vení, mirá el coral ese”. La llaman como nenes. La medusa bentónica que vive en el fondo del mar se hizo viral. En la era de la crueldad, nadie se va a dormir por prestar atención a este espectáculo.
Talud continental 4, a 300 km de la costa de Mar del Plata. GEMPA: Grupo de Estudios del Mar Profundo Argentino. El sonido y el ritmo de la cámara son alucinantes. Es como un arrullo. Están a 2400 metros. “Imaginen 25 cuadras para abajo”. Coral. Colonia. Reproducción asexual: un individuo se separa y forma otra forma.
Parece que el cangrejo se puso a tapar la aspiradora. Todos pendientes del cangrejo. Toman mate y se escucha la succión. Es estar juntos, amor a primera vista, querer que no termine nunca. Silvia dice que no se puede ir a dormir. Y yo te espero. ¿Cómo seguirá la obra?
“Nadia Coralina” se puso en IG la científica que relata encuentros. Me imagino bebas, alfajores, con ese nombre, o con los nombres que entre todos les fueron poniendo a los bichos: la estrella culona, la anémona drag, la batatita de mar, la langosta Barbie. ¿Y si fuera por ahí? Nadia supera a Lali: muestran otros mundos, literal, sin antagonizar. “A Starfish Has Captivated Argentina. It Didn’t Ask to Be Political” dice el New York Times, desde el lugar del otro gran desguace.
Y a la vez es claro el mensaje. Y lo vemos en acción. “Avisen si ven el bicho que me interesa a mí” o “Vamos a ver si encontramos los xxx que son los que estudia xxx de nuestro equipo” o “Xx nos pidió que le busquemos xxx”. Es una utopía también sonora: hablan bajito para no molestar a los de alrededor y uno en el chat dice que es hermoso porque parece que no quieren perturbar el fondo del mar. Se sorprenden con nosotros y es una fiesta cada vez que aparece algo interesante, y reponen qué son y cómo funcionan, su composición, su tipo de reproducción. Hablan de un pulpo que va a morir porque por cuidar a los huevos no sale de la cuevita y no se alimenta. Así es, parece.
Recogen muestras, dejan en paz al cangrejo que se metió en la aspiradora. Es liveness puro. Y aliveness, comunidad. Entre la cobertura mediática, ideología, memes y boca en boca esto es un fenómeno. Desertamos sin irnos del todo. Bifo tenía parte de razón.
¿Y si el amor fuera eso? Las criaturas que ves y no te podés llevar. Saber que existe ese mundo, aunque no formes parte de él. Un mundo por fuera del lunes a viernes, de las citas, de las salidas, de las expectativas, de las heridas. Sorpresa y muchos minutos, incluso horas, sin nada. Y cómo pasar el tiempo, tomar mate, pedir mate, qué pasó con el mate. Y preguntas, qué son esas partículas, y que si cayera una ballena de la superficie, otra forma de muerte, sería un oasis para estas criaturas. Mover el agua, repararse de las corrientes.
Hubo una época en que me interesó el mundo acuático. Fue antes de las estrellas. Guía para peces de colores. El jardín de los cerezos en versión marina. Anotar acá cómo resolverlo ahora basado en lo que cuenta Solnit de esa instalación en el libro sobre perderse.
Comunidad, solución para los insomnes. Transmiten las 24 horas. Oradores y públicos por fuera de la lógica del “nosotros vs. ellos”. Cuidar. Les preguntan qué van a cenar. Les preguntan, y todos hinchan por la ciencia y por Argentina y hay chistes sobre eso, sobre la argentinidad al palo. A ver cómo andan, a ver en qué andan, durante las horas insomnes, a la hora del almuerzo, al final del día. Una distracción sin duda política. Micro-política. Una colonia, una comuna. ¿En serio ese pez, esa criatura, es así?
Memes comparándolos con figuras políticas. El humor dentro del desastre. Irse a aguas profundas, flotar un rato. Otra forma de estar ahí. Ahora miro todo como si estuviera en el fondo del mar. Los collares que colgué en la pared, algunos rotos, podrían ser corales. Coralinas.